No hay camino hacia la felicidad
— la felicidad es el camino.
La felicidad no está en el futuro, está en cómo vivimos hoy. Para hacer el camino más ligero, existen herramientas que transforman nuestra calidad de vida: la gratitud, la atención plena, el equilibrio cuerpo-mente. No se trata de llegar a un destino, sino de aprender a usar lo que ya tenemos para disfrutar el presente. La felicidad es ahora, en cada paso.